25 mayo 2006

El Entrañable Mundo de la Obstetricia



Con sus cálidas y cercanas sesiones informativas donde:

"Se busca informar a ambos miembros de la pareja, para que adquieran habilidades para la atención del recién nacido y para que pierdan el miedo. Se teme más a lo desconocido que lo racionalizado".

Sin embargo, conforme se profundiza en las tiernas enseñanzas obstétricas encontramos cosas como:

"Jamás debe emplearse la palabra dolor cuando nos dirijamos a una embarazada".

La palabra dolor es tabú. Es cruel, es premonitoria y, ante todo, (salvo anestesia) es casi tan segura que se va a dar que da miedo (O espera... ¿lo desconocido no da más miedo todavía?)

Y seguimos profundizando en estas cálidas enseñanzas hasta que llegamos al momento del parto y ¿cómo llamamos entonces a las contracciones?

Contracciones Malas: Duración inferior a 30 segundos. No dolorosas, el útero es depresible a la exploración con los dedos.

Contracciones Buenas: Duración superior a 45 segundos. Dolorosas. La pared no es depresible.

Ya ven, qué entrañable mundo éste. Donde el dolor, o se convierte en tabú o cuando se da es bueno: "Venga, venga, señora, no grite, que son las contracciones buenas".

Ains... qué bonito el mundo de los eufemismos. Sólo falta alguien cantando de fondo durante los gritos del parto algo así como: "And I think to myself... What a wonderful world".